Una tarde mágica en la terraza más vibrante de Madrid fue lo que viví, rodeada de nuevas caras, buena energía y conversaciones que prometen futuro
Hay eventos que se viven, y otros que se sienten. EO Happy Hour, celebrado esta semana en la espectacular terraza de Warehouse, fue definitivamente de lo segundo. Un encuentro cargado de buena vibra, nuevos rostros y muchas ganas de compartir, en uno de esos espacios que parecen hechos para que las cosas sucedan.
Bajo el cielo madrileño y con la ciudad de fondo, Warehouse se convirtió en el escenario perfecto para un afterwork lleno de energía positiva, risas espontáneas y conexiones genuinas. La magia de este evento no solo estuvo en la localización —que es sencillamente espectacular— sino en el ambiente cálido y distendido que se creó desde el primer brindis.
Lo mejor de la tarde fue, sin duda, la gente. Personas de perfiles distintos, con ideas, proyectos e historias que se entrecruzaban en cada conversación. Fue una oportunidad para reconectar con conocidos, conocer nuevas caras y, sobre todo, dejarse llevar por la espontaneidad de los buenos encuentros. Porque cuando el entorno acompaña y la actitud es abierta, todo fluye.
EO Happy Hour nos recordó que los mejores momentos muchas veces ocurren sin guion, simplemente dejando que el reloj se detenga por un rato para disfrutar del presente. Gracias a todos los que hicieron posible este encuentro, y por supuesto, al maravilloso equipo de Warehouse por crear un espacio donde uno siempre quiere volver.